Un médico a domicilio es un profesional de la salud que ofrece sus servicios directamente en la residencia del paciente, brindando una atención médica personalizada y adaptada a las necesidades específicas de cada individuo. Este servicio es ideal para aquellos que, por razones de salud, movilidad reducida o conveniencia, no pueden o prefieren no desplazarse a un centro médico. El médico a domicilio puede realizar consultas generales, diagnósticos, prescribir tratamientos, e incluso manejar emergencias que no requieran equipo hospitalario complejo. Este tipo de atención es especialmente útil para personas mayores, pacientes con enfermedades crónicas o aquellos que necesitan seguimiento continuo sin la molestia de traslados. Además, el médico a domicilio ofrece la ventaja de evitar la exposición a infecciones en entornos hospitalarios y proporciona una experiencia más cómoda y menos estresante para el paciente y su familia. En resumen, es una opción que combina conveniencia, seguridad y atención personalizada.